Salita de estar

Cuando vi por primera vez esta salita de estar, me di cuenta de todas las posibilidades que tenía. El mayor problema de esta estancia era sin duda la acumulación de objetos y enseres personales. Se había convertido en algo así como la habitación para todo, sala de estar, de plancha, de ejercicio… una estancia muy personal con muchos elementos y objetos decorativos antiguos. Otro de los puntos negativos eran los pequeños desperfectos, como rodapiés despegados y la pintura de la ventana muy desgastada por el paso del tiempo.

Sin embargo, y como todas las estancias que visito, esta también tenía algo especial que ofrecer, tan solo había que trabajarlo un poquito para hacerla relucir de nuevo, y eso fue lo que hice.

Para el cambio de esta sala contábamos con un presupuesto muy limitado por lo que decidimos respetar las paredes pintadas en verde, y aprovechando que este es un tono equilibrado y fresco adaptamos los cambios en torno a él.

Lo primero fue retirar los muebles viejos, la tabla de la plancha y todos los objetos personales, consiguiendo así despersonalizar la estancia.

Aprovechamos el sofá, dándole una limpieza a fondo y se reutilizaron materiales existentes en la vivienda como la mesita de centro hecha con un palet de madera a la que se le dio una mano de pintura. El cesto de mimbre blanco también es reciclado de la casa, al igual que la mesita camilla a la que dimos una mano de pintura blanca para aportarle más luz y la utilizamos como mueble auxiliar.

Los bordes de la ventana se pintaron también en color blanco para hacerla resaltar y darle un buen uso a su repisa, en la que se colocó una planta de hoja verde para darle frescura y el detalle del libro en rosa palo que junto con el cojín del sofá y las latas recicladas pintadas en ese mismo tono hacen del conjunto de elementos decorativos una combinación fresca y actual.

Por último buscamos un elemento a resaltar y destacar en esta estancia, así que optamos por un cuadro de tela que mezclara los colores del conjunto de salita y al mismo tiempo le diera ese aire actual que necesitaba, y unido a la jaula con flor del suelo se consiguió crear una zona totalmente renovada y fresca.